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Ridículo

Petro y su delirante idea para erradicar las plantaciones de coca: un congresista lo tildó de "vende humo profesional"

El presidente Gustavo Petro no para de mentir y delirar. (Foto: GROK - IA)

El presidente Gustavo Petro sacó otra de sus ideas revolucionarias de la galera y la lanzó en pleno Consejo de Ministros televisado el lunes 3 de marzo: acabar con las 55.000 hectáreas de coca en el Catatumbo… ¡pagándole a los campesinos para que dejen de sembrarla! Sí, porque aparentemente, según su plan, si les dan plata, los cultivadores dejarán voluntariamente el negocio más rentable de la región.

La jugada maestra de Petro consiste en erradicar 25.000 hectáreas en solo 90 días, durante el periodo de decretos de conmoción interior, a cambio de “platica” para los campesinos que accedan a cambiar la coca por cultivos legales. Además, el presidente prometió titular tierras para que los campesinos tengan una propiedad formal y, de paso, frenar el avance del ELN en la región.

Pero, como era de esperarse, la reacción no tardó en llegar. Desde el Congreso, el opositor Óscar Campo, del partido Cambio Radical, despotricó contra la propuesta y no se guardó nada. Con la sutileza de un elefante en una cristalería, el congresista calificó a Petro como un “vende humo profesional”, asegurando que sus discursos suenan bonitos, pero a la hora de los hechos, el cumplimiento brilla por su ausencia.

Campo puso sobre la mesa cifras demoledoras: en 2023, la ejecución del Programa Nacional Integral de Sustitución de Cultivos de Uso Ilícito (PNIS) fue de un mísero 17 por ciento, y en 2024, apenas llegó al 26 por ciento. O sea, si los campesinos esperaban una alternativa sólida al narcotráfico, lo que han recibido hasta ahora es puro aire.

Pero eso no es todo. Según el congresista, en Norte de Santander, de las 1.565 familias que accedieron a renegociar el PNIS, ninguna ha recibido los insumos ni los materiales prometidos para desarrollar sus proyectos productivos. En otras palabras, los dejaron viendo un chispero.

Para rematar, Campo sentenció con una frase demoledora: “Señor presidente, usted ha llevado a muchos campesinos al peor escenario posible: por un lado, los grupos armados los presionan, y por el otro, su gobierno les incumple”.

Así que ahí lo tienen: una propuesta que suena a cuento de hadas, una oposición que no se come el cuento y unos campesinos que, una vez más, quedan atrapados en el limbo entre la violencia y las promesas incumplidas. Mientras tanto, Petro sigue lanzando humo… y el país, viendo cómo se disipan sus esperanzas.

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