A pesar del optimismo mostrado por el gobierno, el panorama en las EPS intervenidas sigue siendo crítico. Los usuarios continúan enfrentando demoras en la atención, falta de medicamentos esenciales y un colapso evidente en la capacidad de respuesta. Estas situaciones han sido ampliamente denunciadas, dejando en evidencia que las medidas anunciadas no han tenido el impacto positivo que el presidente intenta destacar.

Además, expertos y organizaciones del sector salud han señalado que las intervenciones del gobierno han generado más incertidumbre que soluciones. En lugar de fortalecer el sistema, las decisiones impulsadas han profundizado las dificultades administrativas y financieras de las EPS, afectando directamente a millones de ciudadanos que dependen de estos servicios.

El discurso del presidente parece alejarse de la realidad que viven los usuarios del sistema de salud. Mientras las promesas oficiales intentan pintar un panorama alentador, los hechos demuestran que la crisis en el sector continúa agravándose, dejando claro que las intervenciones gubernamentales no han cumplido con su objetivo de garantizar un acceso digno y eficiente a los servicios de salud.

Las críticas hacia la gestión de Gustavo Petro en este ámbito siguen acumulándose, mientras miles de ciudadanos siguen esperando soluciones reales y efectivas para un sistema sanitario que parece estar al borde del colapso.